La sombra de una duda


Charlie Oakley acude a casa de su hermana en el pueblo californiano de Santa Rosa. Su sobrina Charlie siente fascinación por su elegante tío. Pero ésta empieza a recelar cuando su tío le regala un anillo con una inscripción grabada. A la localidad llegan dos detectives que investigan el caso de un asesino de viudas. La sobrina, movida por la curiosidad, acude a la hemeroteca para averiguar cual es la noticia que su tío ha recortado del periódico.

akas: Shadow of a Doubt, L’ombre d’un doute, De Schaduw van een Twijfel, Im Schatten des Zweifels, L’ombra del dubbio, Skuggan av ett tvivel
1943, USA, 100 min.
Director: Alfred Hitchcock Guión: Gordon McDonell, Thornton Wilder Fotografía: Joseph A. Valentine Música: Dimitri Tiomkin Intérpretes: Teresa Wright, Joseph Cotten, Macdonald Carey, Henry Travers, Patricia Collinge, Hume Cronyn, Wallace Ford, Edna May Wonacott, Charles Bates, Irving Bacon, Clarence Muse, Janet Shaw Ver en Filmin


Un comentario en “La sombra de una duda

  1. Quizá la mejor película del maestro del suspense, en el sentido de que consigue aprovechar todas las posibilidades de la historia, y crea una atmósfera realmente opresiva en cuanto a la angustia interior del personaje de Teresa Wright. Los puristas dirán que si «Vertigo» que si «Psicosis», sin embargo me parece entender que todas las virtudes de Hitchcock están presentes en este film, quizá menos espectacular que otros, pero aún así memorable de principio a fin. Todos los sentimientos (sospechas, culpa, traición, miedo) de un buen film de intriga se hallan potenciados por la soberbia dirección y una fotografía muy conseguida. Excelentes tambien los actores secundarios.

    Hay otro film mayúsculo pero poco difundido del cineasta que ahonda en esta linea, «Falso culpable». Ambos son precisos subrayando las contradicciones del ser humano en situaciones límite, y en el fondo, más acordes con el estilo y las intenciones de un director empeñado en hacer historias calculadas al máximo para mostrar la soledad del individuo.

    Ya en sus primeros films («El enemigo de las rubias») trata de comprender dentro de los parámetros del suspense a unos personajes enclaustrados en sí mismos. Luego («Rebeca», «Encadenados», «La soga», «Atormentada», «Vertigo», «Psicosis», «Marnie la ladrona», «Frenesí») va realizando estudios psicológicos todavía más penetrantes sobre cómo la identidad personal se acrecienta o diluye hacia un lado u otro al estar expuesta a la maldad.

    En suma, si se quiere entrar en el universo plenamente hitchcockiano, ésta me parece la mejor puerta. Una película a reivindicar, sin duda.

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