Aunque a duras penas gana lo suficiente para cubrir gastos y tiene que conformarse con desagradables casos de divorcios, el detective Ira Wells está decidido a permanecer en activo a pesar de su avanzada edad. Cuando su compañero Harry Regan es asesinado, Wells se hace cargo de su caso: la extraña desaparición de un gato. El detective no deja, sin embargo, de investigar la muerte de su compañero y, con la ayuda de la dueña del gato, llega a descubrir que el asesinato de Reagan está relacionado también con la desaparición del animal.
akas: The Late Show, Le chat connait l’assassin, Ostatni raz
1977, USA, 94 min.
Director: Robert Benton Guión: Robert Benton Fotografía: Charles Rosher Jr. Música: Kenneth Wannberg Intérpretes: Art Carney, Lily Tomlin, Bill Macy, Eugene Roche, Joanna Cassidy, John Considine, Ruth Nelson Fecha de estreno: 22 de septiembre de 1978 Ver en iTunes, prime video
Carteles de Cine 
Recuperación del aroma del cine negro de los años 40 en cuanto a espíritu, banda sonora, caracterizaciones y ambientación, aunque la trama ocurre en epoca más actual: el desolado Hollywood de finales de los años 70.
Un viejo detective, cojo y con audífono, se ve inmerso en una oscura historia de asesinatos y dinero, por medio de un viejo amigo y una atribulada joven. A partir de aquí, el espectador recupera los esquemas de los clásicos del género («El halcón maltés», «El sueño eterno», «Adiós múñeca», «Historia de un detective») rodados con convicción por un entonces prometedor director (tras su curioso western cinéfilo «Corazones del Oeste» y antes del taquillazo que supuso «Kramer contra Kramer»).
Producida por el estudio que fue clave en la concepción y desarrollo del género en los años 40 y 50 (Warner), el film incorpora elementos de la comedia casi «screwall» o alocada con el personaje de Tomlin, y ésta se complementa a la perfección con el tono de la historia y la personalidad solitaria, seca, lúcida del protagonista central (el excelente Art Carney, Oscar tres años antes por su inolvidable composición en el reivindicable e infravalorado film «Harry y tonto»).
Buenos secundarios (Roche, Bill Macy, Joanna Cassidy, Considine) y guión vistoso y trabajado para este film que recupera esencias y en cierto modo moderniza partiendo desde la base un cine tan mitificado como el ´noir´.
Simbiosis acertada entre lo que quiere representar y lo que consigue, el film destila buenos momentos, ejemplifica la confusión típica en ciertos momentos del argumento y logra un aroma particular, reconocible, en el contexto de un cine norteamericano en grave crisis (finales de los 70), que buscaba en sus propias raices una salida al estancamiento de creatividad, que abría sus puertas a los jóvenes realizadores en busca de nuevos éxitos, pero que languidecía con la excepción de algunos hits aislados pese a la potencia cualitativa de su producción anual.
Por otro lado, supone uno de los últimos buenos ejemplos de cine negro, ´especie´ en extinción en esos años al igual que el western y el musical (dos años antes se habia estrenado «La noche se mueve» de Arthur Penn, de parecidas intenciones formales, faltan un par de años para nuevos intentos con «La dama de rojo» y «Cliente muerto no paga»).
Recomendada para los amantes del género y para ese tipo de público que jamás desprecia una buena historia. El film tiene bastante interés.
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